(...) afirma que la fidelidad es "antinatural" y conlleva renunciar a muchas cosas (...)Anda que no es casualidad. Justamente hablaba el otro día de que "Para otro día queda el debate ése de si los hombres somos infieles por naturaleza." y dejaba mi opinión ya casi zanjando el tema para no volver a hablar de ello: "Yo no lo creo, lo que pienso es que tenemos poca voluntad y mucho amor por el momento y, en ocasiones, desperdiciamos el asunto ese de las consecuencias a largo plazo (e incluso a medio plazo)." Sin embargo, el destino es así, y casi nada más escribir el post, leí la noticia del libro de Nuria Roca, que tenía como titular el que hoy hace las veces de título del post, y no pude resistirme, tenía que hablar de ello.
Para empezar, hay que decir que la frase (que empieza este post como cita) tiene dos partes, una con la que estoy de acuerdo (con matices), y otra con la que no (con matices):
- La primera parte, y es con la que no estoy de acuerdo, es la que coincide con el título del post: la fidelidad es "antinatural". No sé si decir eso es lo mismo que decir que la infidelidad es cosa de la naturaleza humana, supongo que sí. Como decía en el anterior post ya citado, en el caso de los hombres, creo que eso no es cierto.
En principio porque generalizar es odioso y, la mayor parte de las veces, incorrecto (sería mucho más fácil que se pudiera generalizar en todo pero...). Creo que hay personas y personas. Unos tienen cierta tendencia a la infidelidad y otros menos. Claro, esto me lleva a una cosa interesante. ¿Se podría asumir que esta frase es cierta, que lo único que cambia de unos a otros (y evita que el 100% de las personas con pareja sean infieles) es la capacidad de llevar a cabo sus deseos naturales, su capacidad para acallar su conciencia o su falta de remordimientos? Es un punto de vista interesante, pero sigo sin creer que sea así. Yo creo que hay gente infiel por naturaleza pero que hay otros que no lo son.
En el caso de los hombres, repito, creo que lo que pasa es que muchos buscan/buscamos el placer del momento sin pensar en las consecuencias a medio/largo plazo, por lo que podemos hacer cosas que no nos convienen, como engañar a nuestras parejas, ya que hablamos de eso, pero también cosas como faltar un día al trabajo o a clase por hacer algo que nos apetece más. Creo que eso es muy común en los hombres y que lo único que nos hace diferentes a unos de otros en este punto es la cantidad y calidad de voluntad que uno tiene para sustituir el placer del momento por la felicidad del mañana.
Ciñéndonos gramaticalmente a la frase, puede que la fidelidad sea antinatural en los animales pero el ser humano, pese a sus instintos subyacentes, tiene una capa más externa que los coarta y más niveles de sentimiento y pensamiento, lo que nos hace no ser tan simples.
Bien, si la frase se refiere a que, en la naturaleza o, a nivel instintivo, lo normal es el buscar el mayor número de parejas posibles para conseguir una propagación óptima a nivel genético, ahí no niego nada excepto que no es algo aplicable al ser humano, ya que no se mueve sólo por impulsos animales, ni siquiera en cuanto al sexo.
- La segunda es con la que estoy de acuerdo: (la fidelidad) conlleva renunciar a muchas cosas. Claro, como decía arriba, estoy de acuerdo con matices. Siendo claros, a lo que se renuncia, siendo fiel a una única pareja, es a la posibilidad de tener más parejas esporádicas. Subráyese la palabra clave posibilidad, no seguridad.
Sí, se renuncia a cosas teniendo pareja pero, si la pareja es la óptima (o una de las óptimas: no quiero ser idealista ni categórico), lo bueno que tiene es que lo que se obtiene es muy superior a lo que se deja de obtener. Aunque sólo sea a nivel sexual, que parece que es de lo que trata el libro de Nuria Roca y es el contexto de su frase, supongo, se obtienen muchas cosas como seguridad (o aumento de posibilidades :P), la oportunidad de poder evolucionar en las relaciones con la otra persona llegando a altas cotas de satisfacción (con muchas parejas uno también evolucionará, pero no con una sola persona, por lo que cada uno de los componentes de una unión sexual momentánea, ha evolucionado al margen del otro, por lo que ha llegado a lugares diferentes no siempre compatibles), unir el sexo con otras emociones paralelas que nos hacen disfrutar más...
Hablando claro y, seguramente, de forma simplista y errónea, pero muy gráficamente: uno pierde la oportunidad de poder intentar tirarse a muchas personas por la seguridad de tirarte a la misma siempre que quieras.
En fin, ya se ve que, me tiras de la lengua, y no paro. Supongo que estos temas siempre tienen mucho de lo que discutir y argumentos válidos en cada postura que se pueden discutir igualmente, por lo que, la verdad absoluta, una vez más, no existe: cada uno es cada uno y hace lo que quiere y, al final, si puede hacer por lo menos eso, no podrá quejarse demasiado, porque ha elegido su opción y ha intentado llevarla a cabo (porque, hombre, uno no siempre consigue lo que quiere...).
hola! bueno...de acuerdo en algunas cosas y no tanto en otras...mi profesora de sociología decia que lo único natural para el ser humano es: nacer, crecer, reproducirse y morir;... supongo que todo lo demás lo elegimos, y la infidelidad o fidelidad es algo que se elige... creo que depende del tipo de relacion que uno tenga...quiero decir que la fidelidad se relaciona con el grado de compromiso que se tiene con la otra persona...
ResponderEliminargalasalvador.blogspot.com
Yo estoy de acuerdo con eso: no creo que la infidelidad sea antinatural, sino elegida... Sinceramente no recuerdo todo lo que puse en el artículo, pero mi opinión siempre ha sido esa aunque, quién sabe, puede que me haya liado al hablar y no haya quedado claro.
ResponderEliminarUn saludo